Un video sexual protagonizado por Marilyn Monroe será subastado en la Feria Internacional de Coleccionismo Cinematográfico de Buenos Aires, que se celebrará el 6 y 7 de agosto próximos. La base de la licitación se fijó en 500.000 dólares. Ya se recibieron ofertas de coleccionistas de Noruega y Japón.
El promotor de la venta, el español, el español Mikel Barsa, informó que el film será subastado el día 7 a las 19 horas en el Centro Cultural Borges. La base se ha fijado en quinientos mil dólares.
El cortometraje, en blanco y negro y de seis minutos de duración, habría sido filmado en 1946, cuando Marilyn era todavía Norma Jean Baker. Estuvo hasta ahora en manos de un coleccionista español cuyos herederos, al encontrarlo, se contactaron con Barsa, quien ya había comercializado la única copia (en 16 mm.) conocida anteriormente. Esta nueva copia, en cambio se presenta en el formato de 8 mm.
Barsa ha dicho que ya recibió ofertas de dos coleccionistas de Noruega y Japón, y espera que durante la subasta, en la que se podrá participar por Internet, la oferta supere el millón de dólares.
El cortometraje, que contiene algunas escenas sexuales bastante osadas, ha generado controversias desde que la copia anterior se divulgó en 1997. En ese momento se cuestionó que su protagonista fuera realmente Marilyn, quien tenía menos de 21 años en la época de su rodaje. La cara de la mujer luce considerablemente diferente a la de la futura estrella, pero se ha señalado también que se parece más a ella que la Monroe de Locos de atar, la película que rodó con los hermanos Marx en 1949, en la que lucía algo excedida de peso y sin el lunar en la mejilla izquierda que le adjudicaron después.
También Scott Fortner, propietario de una gran colección de objetos relacionados con Marilyn, ha negado que la mujer de la película sea ella. Entre muchos objetos pertenecientes a la estrella que integran la colección de Fortner hay un cinturón que, según él, demuestra que la futura actriz era mucho más delgada.
"Esa no es Marilyn. Su barbilla no es la misma, los labios no son los mismos, los dientes no son los mismos", sostiene ese admirador enojado. "Marilyn era pequeñita, y puedo comprobarlo porque soy dueño de su ropa``.
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