Los hermanos Marcela y Felipe Noble Herrera se sometieron este viernes a la extracción de nuevas muestras de sangre y saliva en el Banco Nacional de Datos Genéticos (BNDG) que funciona en el Hospital Durand, para que sean cotejadas con las pruebas depositadas allí por familiares de desaparecidos de la última dictadura militar.
Los hijos adoptivos de la directora del diario Clarín, Ernestina Herrera de Noble, llegaron al sanatorio a las 9.30 y realizaron el procedimiento en presencia de la jueza Sandra Arroyo Salgado -a cargo de la causa-, los fiscales y peritos de todas las partes.
Los abogados de las querellas expresaron su satisfacción por "el cumplimiento de la ley", aunque manifestaron también su "cautela" debido al giro sorpresivo en la decisión de los hermanos Noble que, luego de diez años de negativa, cedieron en practicarse el análisis.
"Luego de diez años de postergaciones, se cumple hoy con la ley", dijo el abogado de las Abuelas de Plaza de Mayo, Alan Iud, antes de entrar al Durand.
En tanto Pablo Llonto, abogado querellante de la familia Lanouscou-Miranda coincidió y destacó que éste es el "primer paso para que se cumpla con la ley que las Abuelas reclamaban hace años y se pueda saber la verdad" respecto de la filiación de Marcela y Felipe.
La primera etapa del proceso es la extracción de sangre, la segunda la obtención del perfil genético y la última el cotejo con otras muestras para determinar el ADN de los hermanos y poder resolver si son hijos de desaparecidos, precisaron los letrados.
El proceso llevaría entre "tres y cuatro semanas", y contemplaría el cotejo con las muestras ya existentes pero, en caso de dar negativo, también "con las muestras que se sumen", detallaron los letrados.
"Esperamos que este primer paso se de con mucha prudencia, teniendo en cuenta la decisión sorpresiva de los hermanos Noble, que la semana pasada se ofrecieron voluntariamente a la obtención de la muestra", dijo el abogado Iud, de las Abuelas de Plaza de Mayo.
Fuente: minuto uno
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