Eugenia Tobal le pone cuerpo y belleza a Rosario Ahumada en LOS UNICOS

Dice que a su nuevo personaje sólo le presta el cuerpo. Pero ella y Rosario Ahumada tienen en común el arte de la seducción. Logró meterse a cada periodista en el bolsillo antes de empezar a responder alguna pregunta. Ella simplemente cae bien. Y claro, casi sin darnos cuenta ya está manejando la conversación.
Se la ve definitivamente sexy: arriba, una blusa negra con escote pronunciado y abajo, mini short azul. Cuesta creer que esta mujer sea la que se desempeñaba como mecánico en Valientes, muchas veces con la cara sucia, en el taller y rodeada de fierros. Ella es Eugenia Tobal, una mujer de 35 que lleva más de la mitad de su vida dedicada a la actuación. Hoy, en Los únicos, la nueva comedia policial de El Doce, le toca ser Rosario Ahumada, una mujer fuerte, que sabe lo que quiere y va por ello. "Es una ladrona profesional, de guantes blancos y estafadora. La reina de la mentira, le dicen. Es muy seductora, es muy profesional en lo que hace. Todo lo que quiere lo consigue, como sea. Monterrey la saca de la cárcel y la recluta porque todo lo que hace, la hace única", asegura Eugenia sobre su criatura.
"Es muy especial -continúa- porque va a ir contra el que se le cruce por el camino, en este caso capaz que se le cruza María (Griselda Siciliani) por el camino... ¡Y bueno! Tendrá que ir contra ella porque le echó el ojo a Diego Rouvier (Mariano Martínez)", anticipa Tobal.
Tal vez sea por su look de mujer fuerte, pero a simple vista parece que le queda bien un rol de mucha acción. "A mí me encanta. Me gusta, lo disfruto. Me divierte hacer acción, la paso bien. ¡El problema de este caso es que lo hago siempre en tacos! ¡Una altura importante! Lo cual se me hace un poquito más dificultoso... los gemelos están un poquito grandes, y el tema de los cayitos en los dedos, también, pero bueno, me la banco", dice entre risas. "¡Soy como un ángel de Charly!", exclama.
La rubia de piernas largas y estilo atlético no puede pasar la primera ronda sin que se le pregunte sobre los secretos de su estado físico. "Yo era gimnasta de chica. Mucha gimnasia deportiva, como 10 años".
-¿Y todo eso, lo aplicas acá?-El cuerpo tiene registro. Después hice voley, mucho deporte de chiquita, y últimamente natación. Entonces, no es que me mato en el gimnasio ni mucho menos. Es un cuidado natural, porque me gusta, porque me hace sentir bien y porque, aparte, es mi trabajo tratar de estar bien. Pero tampoco me enloquezco.
-¿Te gusta verte?
-Sí, me veo, me gusta. En general después yo me engancho con el programa, como una espectadora más. Soy bastante crítica, pero constructiva, con lo que hago.
Se la vez feliz con su personaje. Y para la alegría de sus admiradores, ella cree que Rosario Ahumada será quien, por fin, la ayude a mostrar su lado más femenino. "Lo que tiene de bueno Rosario, que no lo hice en otros personajes, es explotar esta parte más sexy. Venía haciendo otros personajes más reos, más fuertes, en los que no se me veía demasiado la parte más femenina o sexy. Y me parecía interesante que pudiese aparecer y que la gente viera otra cosa, cuidar esa parte femenina".
Y ahí nomás cuenta sobe escenas jugadas, y asegura que después vendrán "las plumas y el conchero, a fuuuull".
-¿Qué cosas no harías nunca?
-Nunca digas nunca. Siempre guiate por lo que te dice la panza. Nunca me pongo techos, yo no sé. Sé que hay cosas que no me gustan pero no sé en qué momento de la vida me puede agarrar algo que creía que no me gustaba y en ese momento, me gusta. Hay que guiarse por el primer instinto.
-En este proyecto, ¿el instinto te dijo que sí? -Sí, me pareció que estaba bueno para mí. Yo me encontraba en un año copado, muy tranquila. Haber hecho mi programa me devolvió seguridad y tranquilidad. Yo evidentemente no soy para quedarme a esperar a que suene el teléfono. Soy muy activa, y lo escribí con mucho amor. Y lo llevé adelante con mucho esfuerzo, se llama Rutas Solidarias (Canal Encuentro).
El furor de los realities
-¿Qué sentís, como actriz, con los chicos que salen de un reality y se ponen a actuar?
-Son momentos. No sé cuánto dura eso. Ojalá que si alguno tiene talento y siguen, como hubieron muchos que hoy están trabajando después de haber atravesado realities, es porque algo bueno deberían estar haciendo, o hacen, o tienen para mostrar. A mí me parece que es ideal que la gente sea genuina con lo que es, con lo que hace y que no engañe al público con la necesidad de ser famoso a cualquier costo. Este trabajo es muy vertiginoso y es muy engañoso también. Entonces, me parece que lo que después queda para el espectador o para la gente que te quiere, o te sigue es, básicamente lo que es uno. La nobleza de uno y el amor que le pone uno al trabajo. No me pasa nada en realidad, que cada uno haga su vida, pero lo bueno es que no se engañe al espectador.
Tiempo para ella
-Tenés mucho trabajo. ¿Te queda tiempo para el amor?
-Sí, pero también, si hay un compañero que entiende y acompaña, eso también está bueno para llevarlo con uno. El que está acompañándome sabe y entiende de qué se trata de esto y que hay momentos en que voy a estar poco y hay momentos en los que estaré más. Y habrá momentos para armar algo y otros en los que estaré como loca.
-¿Ganas de ser mamá?
-Muchas. Pero no ahora.
Si bien cuenta que viene de una familia muy constituida y que tiene ganas de formar su propia familia, piensa que todo debe ser a su tiempo. "Cuando sea, será. Si no pasó todavía es porque no tenía que ser. Si no, ya hubiese pasado, con otras relaciones o con otras parejas. Yo soy medio de pensar de esa manera, me parece que es la manera. No es la manera más fácil pero sí la más sana que uno tiene para pensar. Las cosas son por algo. Y ahora... acá estamos haciendo esta nota porque ahora, llamando al 0600, mandá un SMS al... La Tobal logra la risa propia y la del resto. Y da por terminada la entrevista.
FUENTE VOS